Bueno, me ha costado rearrancar con el blog...Pero es que me he pasado unos cuantos días de fiesta y me apetecía perrear un poco...Así que me he pasado tres semanas sumergido en el mundo de Stieg Larsson, Lisbeth Salander y la trilogía Millenium (¡¡¡cómo casi todo el mundo este verano!!!), tocándome los bowlings a dos manos y desempolvando viejos discos...
Así que me he remontado a los gloriosos y mágicos 80´s y principios de los 90´s (ahora es cuándo se me humedecen los ojos y echo un par de lagrimitas), y he rememorado mi época de púber acnoso y pajillero despreocupado, cuándo todos los días se descubría un grupo y los bocatas de nocilla eran casi tan reconfortantes cómo el avistamiento de las peras de cualquier quinceañera que se cruzaba en tu camino...¡Maravillosa adolescencia!
Total, que todo este rollo es para decir que he vuelto a oír los Keepers de Helloween y he redescubierto a Michael Kiske, el superdotado voceras con el que contaban los germanos en esa época (lo de superdotado es por sus cualidades vocales, de su capacidad amatoria ni se disponen de datos ni me importa, ¿ein?).
Tenía a este hombre bastante olvidado, parte por culpa suya, por que desde luego no ha sido muy prolífico discograficamente hablando desde que le hecharan de la banda a principios de los 90´s. Tampoco han ayudado mucho todas sus declaraciones durante estos años renegando de su pasado músical, afirmando que nunca le había gustado el heavy, que es una música con la que no podía expresar sus sentimientos y bla, bla, bla...Vamos, toda una retahila de declaraciones que suenan mal a pataleta de niño cabreado que ahora no se come una rosca...
La foto que he colgado es bastante actual, de hecho pertenece a las sesiones de fotos de su último lanzamiento Past In Differents Ways del 2008 en el que se dedicaba a regrabar en formato acústico himnos de su antiguo grupo (pues, suerte que renegabas de ellos, chaval!!!).
Ya podéis ver cómo le luce el pelo al amigo Kiske, y es que los años no pasan en balde....
A pesar del cachondeo, siempre me ha parecido una gran perdida para el rock que un tio con sus capacidades haya desaparecido del mapa de esta manera, y no este rockeando con una banda de nivel, pero, en fin, es decisión personal suya y hay que respetarlo. A parte de sus discos en solitario y colaboraciones, canta en un grupo de rock AOR llamado Place Vendome.
De los videos que cuelgo, me encanta la balada Always, incluida en su primer disco en solitario Instant Clarity del 1996, y que dedicó a su amigo y ex-compañero en Helloween, el batería Ingo Schwichtenberg, expulsado al mismo tiempo que él y que, enganchadísimo a la heroína, decidió quitarse la vida lanzándose al metro de Hamburgo.
Desde este momento, queda inagurada la nueva sección Desaparecidos En Combate dónde me dedicaré a presentar a los loosers del mundo del entertainment (y hay unos cuantos!!!).
3 comentarios:
Siempre me ha parecido que la voz de Kiske ha sido una de las mejores de la historia del heavy metal (hablando de voces melodicas), y siempre con permiso de James Labrie y Geoff Tate.
Buen post!!!
Saludos
Tienes material para un libro con todos esas rock stars desaparecidas un buen día, incluso tenía pensado hacer algo similar con el guitarra Vito Bratta 15 años desaparecido del mundo de la música. Iremos leyendo estas entregas de "Chuck Norris" del Rock. Y por cierto estoy a punto de sumergirme en el universo Larson y es que tanta insistencia me ha hecho caer, ¿Te ha gustado la trilogia?
Saludos
El pelo perdido de Jack: La verdad es que tienes razón que Michael Kiske ha sido de lo mejorcito...Lo mejor de él es que realmente puede cantar material muy melódico. Personalmente me quedo antes con él que con Geoff Tate. Con el paso de los años ha sabio mejor conservar su vos y pulirla y el Tate, la verdad, ahora mismo se encuentra por debajo de lo que fué.
Manurhill: Si que hay un montón de estrellas venidas a menos y relegadas a un muy segundo plano!!! Pero antes que Vitto Brava, dedicale un post a Mike Tramp...la carrera (y las sesiones de fotos) de este hombre anterior a White Lion no tienen precio...
Leyendo a Stieg Larson, te darás cuenta del porqué del éxito...Són novelas muy cinematográficas...Son cómo ver una película y es fácil comprender su éxito...La verdad es que realmente enganchan y es casi imposible no leerte los tres del tírón. Yo en tres semanas, voy ya por la mitad del tercero...Ya me dirás que te han parecido...
Saludos
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